María García Calvo
¡Y LA TÓXICA, ERA YO! Si, la tóxica era yo, que te buscaba, a pesar de tú indiferencia. La tóxica era yo, que me esforcé para ser suficiente para ti, pero a fin de cuentas, nadie es suficiente para tu vacío. La tóxica era yo, que rogaba, por caricias y besos La tóxica era yo, que me perdí infinidad de veces, solo para estar a tu altura. La tóxica era yo, que justificaba tus acciones, creyendo que así, me querrías un poco. Si, la tóxica era yo, pero ya reaccione, ya desperté, he comprendido, que fui yo, quien te dio el control de mi vida, fui yo quien te dejó entrar y seré yo, quien te olvide y té saque de mí, porque ya no seré la tóxica, ahora es mi turno, de poner la frente en alto y vestirme de orgullo.
No tu no eras la tóxica, el imbécil x decirlo suavemente era el
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